CAPITULO
II: La guerra judicial contra el presidente electo, Dr. Bernardo Arévalo.
Por Juan de Dios Simón.
Es un intento de golpe de Estado blando. Es blando porque no utilizan físicamente al ejercito ni utilizan tanques o armas de fuego para imponer su voluntad, sino utilizan mecanismos judiciales para lograr sus fines. El objetivo tácito del golpe blando es lograr la ruptura de la institucionalidad política, desprestigiar al Tribunal Supremo Electoral y despojar de los cargos públicos al binomio presidencial electo y a los diputados del Movimiento Semilla, legítimamente ganados en las urnas, a través del voto popular.
Después
de la denuncia del Dr. Arévalo hecha el día 1 de septiembre sobre un proceso de
golpe de Estado en curso, me acordé del profesor Christian Espinoza de la
Escuela de Gobierno y desempolvé el libro Un-restricted Warfare, de los coroneles
chinos Qiao Liang y Wang Xinagsui, quienes de manera académica y ordenada plantean
los tres mecanismos de guerra no convencional.
- 1. La
guerra psicológica: Orientada a influir en la psicología y emociones de la
población.
- 2. La
guerra mediática: Para lograr el control de la opinión pública.
- 3. La guerra judicial. Que busca criminalizar y perseguir a través de los instrumentos legales y penales. Aquí se aplica el concepto de “Lawfare”, que indica como se utiliza el Sistema de justicia y las instituciones para dañar y deslegitimar a oponentes y limitar sus derechos legales.
El análisis de esos tres mecanismos descritos, con relación al contexto político actual de Guatemala, se puede inferir que, en Guatemala, efectivamente hay un proceso de golpe de Estado blando contra el binomio electo Dr. Bernardo Arévalo y Dra. Karin Herrera, los diputados electos del Movimiento Semilla y contra los magistrados del Tribunal Supremo Electoral.
Desde la parte psicológica: Se usan varias técnicas para influir en el sistema de valores, en el sistema de creencias, en las emociones, en el razonamiento o en el comportamiento del público. Se combinan a menudo con operaciones encubiertas y tácticas de falsa bandera. En este campo, está claro el papel que han jugado los “rumores”, “propaganda agitativa para inducir a la acción de las masas” de algunos pastores de mega iglesias evangélicas que no representan a sus feligreses, ni al mundo cristiano sino a sus intereses, (Casa de Dios, Ebenezer y Fraternidad Cristiana), y porque tienen familiares como diputados en partidos de oposición; caso del hijo de Sergio Enríquez.
Unos días previos a las elecciones de la segunda vuelta del 20 de agosto, aparecieron falsas pancartas indicando al derecho a “elegir el género de sus hijos” y los supuestos indignados; “con mis hijos no te metas”, copia de propaganda republicana en EE. UU.; aparecieron personas, supuestamente del Movimiento Semilla, denunciando al mismo Semilla, esto es la utilización de la falsa bandera. La indignación pública sobre temas del aborto, derechos de la diversidad sexual, agenda globalista, imposición del gobierno demócrata de Joe Biden en Guatemala y que el diablo viene a través de la semilla del mal 666, son estrategias que se están utilizando en el país para descalificar e influir en las percepciones de la gente. La idea era no votar por Semilla, pero el efecto fue lo contrario; no por los mensajes; sino por los voceros utilizados, los corruptos de siempre, sin credibilidad y honorabilidad.
Desde la guerra mediática; se está utilizando un proceso de comunicación eficaz, incluye guías lingüísticas, mensajes clave y enfrentamiento entre medios. Publicación de supuestas encuestas unos resultados a favor de unos, contradiciendo al otro. Unos medios acusando a otros medios. Por ejemplo, está claro la contradicción del contenido de los discursos de los canales de; VEA Canal, redes sociales de El Puerto Informa Oficial, La Hora de la Verdad con Bárbara Hernández, Rodrigo Polo, G. Fratti, Serrano Elías (abiertamente conservadores y de derecha) versus los periódicos tradicionales de Prensa Libre, la Hora, Plaza Pública, radios comunitarias y otros medios de circulación del centro del espectro político, que llevan décadas de informar y formar opinión.
Sobre la guerra judicial, esta consiste en “la utilización abusiva o ilegal de las instancias judiciales nacionales e internacionales, manteniendo una apariencia de legalidad, para inhabilitar o provocar el repudio popular contra un oponente”; esto se ha visto en la utilización supuesta de leyes y procedimientos administrativos para inhabilitar a los partidos de oposición, por ejemplo el tema del Movimiento Semilla (supuestas firmas falsas en la conformación del partido), los temas del Movimiento para la Liberación de los Pueblos, MLP (tema de finiquito de Jordán Rodas) Podemos (tema de Arzú contra Giammattei); y Prosperidad ciudadana; (tema de Carlos Pineda versus Manuel Baldizón). A este último lo sacaron de la contienda, cuando las encuestas ya lo daban como posible ganador para la segunda vuelta.
Obviamente, el Dr. Arévalo, un diplomático experimentado, conocedor de las arenas movedizas y doctrina militar, fue estratégico al dar los nombres específicos de quienes están dando el golpe de Estado, en las que incluyó a la fiscal general, al fiscal de la FECI, al juez séptimo de instancia penal y personas cercanas al gobierno de Giammattei. Ha sido estratégico porque juntos (presidente actual y electo) lograron que el Secretario General de la OEA, incluido a miembros de la inteligencia de Estados Unidos, estuvieran presentes en el proceso de transición del gobierno.
Según el analista Roberto Alejos, hay indicadores claros sobre el golpe de Estado, hay desesperación de acelerar procesos legales y no quieren cumplir con las fechas establecidas por el TSE; el audio de una conversación filtrado entre Giammattei y Miguelito, sobre lo expresado por Giammattei que quiere entregar el poder el 14 de enero antes de las 12 de la noche ya sea a presidente o presidenta; la decisión del Ministerio Público de seguir demandando a magistrados del TSE, arrestar a exfiscales de la FECI y extrabajadores de la CICIG. La solicitud de la fiscal general a la Corte de Constitucionalidad de hacer uso de la fuerza pública para evitar la manifestación y perseguir a quienes están publicando contra ellos. El secuestro de cajas de papeletas electorales; sin aval del Tribunal Supremo Electoral la violación a la Ley Electoral de Partidos, y otras acciones en curso, indican que hay un golpe de Estado constitucional, blanda. La estrategia y la moraleja de la Rana Hervida, está en ejecución.
La intención de cancelar al Partido del Movimiento Semilla está claro y es real; no quieren que asuman sus diputados, no quieren que coordinen comisiones en el Congreso y quieren ponerle candados al presidente electo, en la ejecución del presupuesto del Estado 2024. La Ley Electoral y de Partidos Políticos (de nivel constitucional) establece los causales para suspender o cancelar partidos, y ninguno aplica para el Movimiento Semilla. Ellos (MP, Juez, y medios conservadores) lo saben, pero siguen con procesos espurios, mensajes de confusión e indignación para lograr sus fines. Su lema de que el fin justifica los medios; se traduce en que “El fin de separar al binomio presidencial de la toma de poder, es para mantener la impunidad y el Estatus quo” de quienes históricamente han hecho gobierno.
El proceso del golpe de Estado blando sigue, se descalifica el proceso de transición, pero hay una luz, no es granítica ni orgánica. Los costos económicos, políticos y sociales de este golpe no han sido calculados con los sectores económicos. El CACIF ha dado un mensaje de respetar el Estado de Derecho y reconocer al presidente electo Arévalo, y la Embajada de USA, no tolerarán a otro gobierno, no expresarán apoyo y coordinación con otro binomio impuesto, excepto el binomio presidencial de Bernardo Arévalo y Karin Herrera; electos y ya ratificados por el Tribunal Supremo Electoral. Sumado a esto; pelearse diplomáticamente con un Secretario de la OEA para imponer su punto de vista, ha sido contraproducente para el MP, que se quedará solo.
Con los visibles profesores de inteligencia civil y colegas egresados del Centro ESTNA en el equipo de Arévalo, mi análisis es que el bloque golpista y el famoso “pacto de corruptos”; no prevalecerán. Serán derrotados gradualmente. Quizá porque soy optimista y porque estoy de acuerdo don Moisés Naim, sé que, en el curso de la historia, el poder tradicional pierde cuando se enfrentan con las plazas, con el pueblo organizado.
La
Corte de Constitucionalidad debe ser el árbitro constitucional y apoyar al TSE en
Guatemala, de lo contrario se convertirá en un simple club, grupo consultivo
sin poder real; ante las amenazas y acciones del MP.